lunes, octubre 16, 2006

Un día cualquiera

Hoy sólo me puedo conformar con atrapar miradas de aquellos que caminan en soledad por las calles de mi ciudad. Aunque miro mi cielo negro y justo en el centro en un pounto mas allá de la mirada de un extraño distingo un verde esperanzados que iluminará el mundo en el que estoy encerrada.
El domingo planeé con mi almohada reamueblar mi cabez, empezar de cero o por lo menos intentar crear una vida nueva en la que me sienta más agusto con mi ser.
Pero han pasado tres meses y las pareces siguen sin pintar, algunos dicen que el marrón chocolate sería una buena opción, pero no se si a falta de sexo empezaría a comerme aquel mundo, bonito por decir algo pero tranquilo en el que pueda encerrarme siempre que quiera.

domingo, octubre 01, 2006

Se nota el buen sabor en este aire azul
y el estilo de mis zapatos al caminar
buscando una extensión, un lugar para pisar
terreno donde enchufar el magnetofón.

Porque cositas imaginables quieren descender
del aire, este mundo es una lavadora dando
vueltas a todas horas, menos tú...

Que no te enteras, que la vida no es una carrera
yo vengo de los matorrales de una chavola
sin cristales donde los niñosno llevan disfraz ni traje.

Yo también me tropecé con los escombrosde la ciudad, pero quise coger el control
sin retroceder, y florezco un poco más
cada vez que voy a cantar, cojo carrerilla
y salto el badén.

Porque la vida es un detalle con más
secreto que el potaje,
hay gente con dinero que solo quieren
rascar el cielo, como tu...

Que no te enteras, que la vida no es una carrera
yo vengo de los matorrales de una chavola
sin cristales donde los niños
no llevan disfraz ni traje.

Si no juego otra partida, si me persiguen
si hay gravilla, yo me amarro los cordones
y empiezo a correr

Ojo pardo como el humo
cuando duermo me consumo
yo me tapo las orejas
y empiezo a volar lejos de ti.

Hoy rulando por mi ser
con las tuercas oxidas
he visto un aguila sin poder volar
y que más da si la tempestad
o si las ratas de la basura
que más da si tengo un perro en la luna.

Si esta música que suena
desde el fondo de mi cueva
espanta a los señores de corbata
y con millones como tu...

Que no te enteras, que la vida no es una carrera
yo vengo de los matorrales de una chavola
sin cristales donde los niños
no llevan disfraz ni traje.